“América misionera, bienvenida a Maracaibo”
Fotos de Leonel Sandrea |
Con estas palabras, monseñor Ubaldo Santana, arzobispo de Maracaibo, dio la bienvenida a los misioneros congregados en el 4º Congreso Americano Misionero (CAM4 y COMLA9). Con la solemne Eucaristía presidida por el cardenal Filoni, prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, comenzó este congreso, bajo el lema “América misionera, comparte tu fe”. Enviado expresamente por el Papa, el cardenal destacó en su homilía la petición que le hizo el Pontífice de transmitir a los congresistas su amor y su alegría.
“Necesitamos reflexionar a distancia de cinco siglos de evangelización de este continente”, afirmó Filoni ante las 24 delegaciones de misioneros que se congregaron ayer en la plaza de la Basílica de la Virgen de Chiquinquirá. El cardenal subrayó que como misioneros, es necesario poner el centro de toda la acción en Cristo. “Este congreso no es una agregación de fuerzas, ni un sondeo numérico, o una reunión de nostálgicos –explicó-. En este congreso ponemos en el centro a Cristo, y nos proponemos escuchar su voz, hacerle entre nosotros y prepararnos a la misión”.
Siguiendo lo indicado por el Papa Francisco, el cardenal animó a salir de la comodidad de las parroquias y salir a anunciar el Evangelio. “Necesitamos preguntarnos qué es lo que predomina en nuestras iglesias: una pastoral de conservación, o de anuncio”. Asimismo, exhortó a mirar más allá de las fronteras del continente americano, y ser abiertos a todo el mundo, especialmente a los pobres, siempre evitando la pastoral “autorreferencial, politizante, ideologizadora, sin alma”.
“Lleve al Papa nuestro agradecimiento por haberle enviado, siéntase usted en casa”, saludó el presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana y arzobispo de Cumaná, monseñor Diego Padrón. “Nosotros estamos convencidos de que no crece nuestra Iglesia sin la acción misionera”, concluyó. La Eucaristía se desarrolló en un ambiente festivo, y universal. Participaron misioneros de diferentes países, en lenguas diversas, pero con un mismo Espíritu.