Inteligencia sobrenatural
Publicamos un artículo sobre la inteligencia sobrenatural siguiendo la línea de santa Teresa del Niño Jesús y su ascensor
Estamos disfrutando de unos días muy edificantes en el II Congreso Internacional santa Teresa de Lisieux «Mi vocación es el Amor», en la monumental ciudad de Ávila, que para mayor suerte está celebrando estos días unas Jornadas Medievales.
En este contexto el presbítero carmelita Jerzy Nawojowski nos interpelaba a ser capaces como la santa de aplicar la espiritualidad cristiana en este siglo de inventos, tal y como ella hace en su caminito con el ejemplo del ascensor:
«Estamos en un siglo de inventos. Ahora no hay que tomarse ya el trabajo de subir los peldaños de una escalera: en las casas de los ricos, un ascensor la suple ventajosamente. Yo quisiera también encontrar un ascensor para elevarme hasta Jesús, pues soy demasiado pequeña para subir la dura escalera de la perfección. Entonces busqué en los Libros Sagrados algún indicio del ascensor, objeto de mi deseo, y leí estas palabras salidas de la boca de la Sabiduría eterna: El que sea pequeñito que venga a mí…
¡El ascensor que ha de levantarme hasta el cielo son tus brazos, Jesús! » (Historia de un Alma. Manuscrito C)
Retomando el reto lanzado por el presbítero carmelita, y aprovechando que él mismo lo puso como ejemplo, pienso que un invento característico de este S.XXI, por lo menos en lo que llevamos transcurrido, es la «inteligencia artificial» (IA).
Definimos la IA
Según una definición: «La Inteligencia Artificial es la capacidad que tienen las máquinas de imitar la manera en la que los seres humanos aprenden e incluso razonan. Las máquinas aprenden a realizar tareas y a mejorarlas a partir de la información que tienen, tal y como lo haría un humano». «Las inteligencias artificiales utilizan algoritmos y modelos matemáticos para procesar grandes cantidades de datos y tomar decisiones basadas en patrones y reglas establecidas a través del aprendizaje automático».
Con respecto a esta realidad, pienso que el ser humano del S.XXI debería recuperar, digo bien este verbo porque no se crea nada nuevo, la capacidad de desarrollar nuestra inteligencia sobrenatural.
El hombre es un ser que tiende a la trascendencia por naturaleza, tal y como podemos observar si estamos atentos, en todos los ámbitos y culturas.
Esta tendencia a lo que trasciende al hombre, es posible porque está inscrita en el mismo A.D.N de la creación, igual que profundizar en las ciencias es posible porque sus leyes están inscritas en el ser de la naturaleza.
Inteligencia artificial / Inteligencia sobrenatural
Por tanto, al igual que hace la I.A., utilizando los algoritmos y modelos que la Historia de la Salvación nos ha ido revelando, el hombre puede, no crear un conocimiento sobrenatural, sino descubrirlo. Máxime cuando este conocimiento, sabiduría según la terminología de las religiones, es un encuentro personal con Aquel que ha dejado su huella en todo lo que existe.
A partir de la fe, la creación, la formación, la celebración, la comunión, la fraternidad, la caridad, e incluso, a través, del sufrimiento, el dolor o la muerte, el hombre puede descubrir y dialogar con esta inteligencia sobrenatural, que por sobre todo, quiere enseñarnos a vivir, y ser felices en su proceso.
Esta inteligencia sobrenatural es Dios mismo.
Artículo: La Iglesia ante el fenómeno actual de la inteligencia artificial
Una respuesta
Muchas gracias. Genial, hablar de inteligencia sobrenatural.
Y recogiendo unas palabras de Fernando Rielo en su libro «Concepción mística de la Antropología», el «Absoluto nos capacita para dicha comunicación y nos inspira la forma de comunicarnos, aunque nosotros podamos deteriorarla».